Sheila Taormina es un caso excepcional y con 39 años se ha convertido en una de las atletas más reconocidas de todos los tiempos.Se consiguió clasificar para participar en el pentalón moderno al más alto nivel en las olimpiadas de Pekín, sin haber practicado nunca antes algunas de las modalidades que se requieren, ya que, jamás había tocado una pistola, ni una espada y mucho menos montando a caballo. Para ello tuvo que pagar las clases de estas disciplinas que suponían unos 60.000 dólares al año. Pero ella no se echó para atrás y lo dio todo, vendiendo su casa para conseguir el importe necesario para pagar las clases. Y como resultado de todo esto consiguió la clasificación para los juegos olímpicos de Pekín.
Hace unos años se vio acosada por uno de sus alumnos que la amenazaba y llegó a encontrarle merodeando por su casa con una pistola. James Conyers, fue condenado a cinco años de cárcel, pero el pasado mes de enero fue puesto en libertad sin ninguna orden de alejamiento a favor de Taormina. Ella reconoce que no vive tranquila desde que Conyers está en la calle pero su afición al mundo del deporte hace que olvide todo.
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