En el partido que enfrentaron al St. Pauli- Schalke, el colegiado del encuentro, Deniz Aytekin, decidió suspender el partido en el minuto 87, cuando ganaba el visitante por 0-2 y uno de sus asistentes recibió un vasazo de cerveza en la cabeza.En declaraciones a Sky, Aytekin, explicó que durante todo el partido se habían lanzado objetos desde la grada como encendedores. Tras realizar varias advertencias desde los altavoces del estadio, no se consiguió que pararan.
Finalmente un vaso lleno de cerveza impactó contra un juez de línea y el partido se dio por terminado. Los dirigentes del St. Pauli se disculparon con el trío arbitral.
"Han estado en la cabina. Naturalmente sabemos que estas cosas las protagonizan individuos aislados. Ahora tendremos que hacer un protocolo para ver qué decisión se toma al respecto", dijo el árbitro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario