Se disputaba el partido de la Liga sueca entre los equipos del Malmo y el Helsinborgk, cuando el portero visitante, Hansson fue empujado por un aficionado local que consiguió saltar al campo, con la consiguiente suspensión del partido.
El Helsinbor se adelantaba en el marcador cuando transcurría el minuto 30 de partido, lo que provocó que un aficionado del equipo local saltara al terreno de juego y terminara empujando al portero visitante, que terminó finalmente en el suelo.
Stefan Johannesson, árbitro del partido, ordenó a todos los jugadores salir del campo y transcurridos unos 20 minutos decidía suspender el partido. En unas declaraciones a la televisión local comentó “Simplemente es horrible que esto tenga que pasar”.
Además de todo esto el portero del Malmo se fue del terreno de juego con un fuerte zumbido en los oídos tras caer un cohete cerca de su portería, momentos antes de recibir la agresión por parte del aficionado.
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