Decimos esto, puesto que tres corredores estadounidenses perdieron la vida cuando disputaban la prueba. Según informaron los jueces del maratón tomaron la salida más de 19.000 personas.
Uno de los fallecidos, Daniel Langdon, de 36 años, murió cuando había recorrido 17 kilómetros; Rick Brown, de 65, se desmayó cuando llegaba prácticamente a la misma distancia que el anterior y Jon Fenlon, de 26, que cruzó la meta en la distancia de medio maratón, que tenía lugar al mismo tiempo, completando el que sería su último recorrido en 1h53:37.
El organizador de la prueba, Rich Harshabarger, recordó que fueron atendidos todos ellos inmediatamente después de la aparición de los síntomas, puesto que había multitud de puestos de atención médica. También comentó que todos los corredores tienen que contestar a un formulario médico para poder participar y se les recomienda que vayan al médico para comprobar sus condiciones físicas antes de la prueba.
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